No pierdo el asombro al ver al mundo siempre tan diferente y percibir así mismo las diferencias tan grandes de pensamientos.
La diversión de un niño es un parte aguas en un mundo donde cada día estamos más lejos del "columpio de nuestra infancia". Por momentos parece distante ese momento, incluso olvidamos como hacernos de un buen columpio. Considero importante. Muy importante jamás olvidar como hacer uno.Y esto no tiene otra intención que recordarlo a quien ya lo haya olvidado.
Transportarlo de nuevo a esa sensación de "poder volar".
Debemos entender que mientras más lejos de la intelectualidad mejor será nuestro columpio.Ya que los niños encuentran en la simpleza de las cosas la verdadera diversión. Las construcciones meramente complicadas no suelen llamar la atención de mentes expertas en el "arte" de crear y generar diversión a partir de la nada. Por tanto nos encontramos frente una labor divertida. Es inevitable crear un vínculo entre el niño interno que todos llevamos dentro y el niño a cual se pretende divertir.
Como realizarlo:
MADERA + una cuerda + mucha imaginación (click aquí si careces de imaginación)
Resultados finales
No hay comentarios:
Publicar un comentario